viernes, 15 de enero de 2010

Los secretos del viento

Hoy he sentido que el viento me habla, me acerco a la ventana y escucho voces entre las ramas de los árboles.
No, no es mi ya drogada paranoia, parece ser como si el viento quisiera decirme algo y yo simplemente no quisiera oír.
¿Oírlo? ¿Para qué? Me aterra pensar que quiera confesarse y llorar buscando consuelo.

Viento cobarde, aprende a callar tus secretos y calmar tu ira. ¿Dónde estabas cuando te busqué la noche de la tragedia? ¡Alevoso! Devuelve el silencio que me arrebataste esta mañana y calla tus secretos.

2 comentarios:

  1. Entiendo tu molestia contra el vendaval... estos últimos días (con sus soles y sus lunas) el viento parece resollar inquietándome horrores... sencillamente ¡no lo soporto!, así que conmigo tampoco encontrará un confidente.
    ¡He dicho!

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  2. Que se confiese con Superman (si es que lo encuentra) quizás él sí quiera escucharlo.
    Qué afín me haces sentir ;)

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